Muchos os preguntareis por el sentido que tiene empezar hablando de los colores en un blog de Filosofía ¿Verdad? Pero dejadme que os haga una pregunta sencilla ¿Donde esta el color de las cosas?
No os apresuréis a responder. Pensad que cualquier respuesta es cuestionable y a la vez imposible de probar. No se puede deducir que aquello a lo que la gente llama morado, sea igual o exacto a lo que yo llamo morado, básicamente porque no puedo trascender mas allá de mi percepción sensible. (La mía como individuo)
Existe en nosotros una parte sensitiva, que como ya se ha dicho permite percibir lo que esta mas alla de mi yo interno. Disponemos, por otro lado, de otras dos partes esenciales que nos asemejan a los seres vivos (Incluidas las plantas). Una de ellas es la parte vegetativa. La vegetativa es una parte vital y esencial de nuestra vida. No es un misterio que aquel que no come o se alimenta muere.
Otra parte ,que nos asemeja tan solo a los seres racionales, es la llamada parte intelectiva, que permite el uso y el desarrollo de la razón.
Todas estas partes son constitutivas del alma, y se dan segun el tipo de ser que sea. Por ejemplo:
-Una planta tendría la parte del alma nutritiva y otorguemosle también la sensitiva, porque hay plantas que tienen contacto con el exterior(Carnívoras por ejemplo)
-Los animales, también llamados algunos "Seres racionales", dispone de la parte del alma intelectiva. Tal vez la nuestra se encuentre mas desarrollada que en otros seres racionales, pero eso no la hace una parte del alma exclusiva nuestra.
Demostración: Murciélagos.
Los murciélagos buscan alimento, pero no al estilo en que lo hacen los depredadores habituales de acechar y luego atacar. Los murciélagos como algunos sabrán disponen de dos formas de observar. Una es con los ojos, otra con la imagen a través de su radar sonoro, con el que crean una imagen en la mente.
Los murciélagos disponen de una parte intelectiva y bastante grande para lo diminutos que son. ¿Sabías que un murciélago se acerca a las farolas porque enlaza que los seres de los que se alimenta son atraídos por la luz? Cosa curiosa, y una forma idónea de mostrar la unión de las dos partes del alma(Intelectiva y nutritiva a la par que la sensitiva)
Lo que nos diferencia a los seres humanos y lo que nos hace al final interesantes, es la atracción por el estudio de las artes liberales. Aquellas a las que tanto tiempo dedicamos en un pasado presente y posterior futuro.
La semejanza que mantenemos con los murciélagos y aquel mito de que son ciegos, muestra que nosotros al igual que estos seres no podemos conocer todo por nosotros mismos. Para lograr conocer lo que trasciende mas allá de los sentido internos y externos. Necesitamos de otros para conocer.
Es el caso de la teología, que necesita del auxilio de la luz para ver la verdad. Según esta, nosotros hallamos la verdad una vez muertos, pues vemos a Dios que es suma Verdad y sumo Bien.
Y muchos se preguntarán para que les servirá entonces la verdad.
La respuesta es que según la Teología habrá unos que la hallen y otros que no. Los que la hallen serán los virtuosos y amantes de Dios, los opuestos serán los que no. Utilizar por tanto la Palabra de Dios como guia en el mundo sensible es lo adecuado en caso de no poder hacerlo a través de los sentidos. Aunque claro... Para algunos, este no es el mas adecuado. Y resulta incierto y no seguro.
Por tanto y aquí concluyo. Existe mucho conocimiento. Mas del que podamos almacenar. Y he ahí donde entra en juego la finitud humana, pues no disponemos de aquella razón infinita que se le presupone al
¡¡Feliz Semana!!
Otra parte ,que nos asemeja tan solo a los seres racionales, es la llamada parte intelectiva, que permite el uso y el desarrollo de la razón.
Todas estas partes son constitutivas del alma, y se dan segun el tipo de ser que sea. Por ejemplo:
-Una planta tendría la parte del alma nutritiva y otorguemosle también la sensitiva, porque hay plantas que tienen contacto con el exterior(Carnívoras por ejemplo)
-Los animales, también llamados algunos "Seres racionales", dispone de la parte del alma intelectiva. Tal vez la nuestra se encuentre mas desarrollada que en otros seres racionales, pero eso no la hace una parte del alma exclusiva nuestra.
Demostración: Murciélagos.
Los murciélagos buscan alimento, pero no al estilo en que lo hacen los depredadores habituales de acechar y luego atacar. Los murciélagos como algunos sabrán disponen de dos formas de observar. Una es con los ojos, otra con la imagen a través de su radar sonoro, con el que crean una imagen en la mente.
Los murciélagos disponen de una parte intelectiva y bastante grande para lo diminutos que son. ¿Sabías que un murciélago se acerca a las farolas porque enlaza que los seres de los que se alimenta son atraídos por la luz? Cosa curiosa, y una forma idónea de mostrar la unión de las dos partes del alma(Intelectiva y nutritiva a la par que la sensitiva)
Lo que nos diferencia a los seres humanos y lo que nos hace al final interesantes, es la atracción por el estudio de las artes liberales. Aquellas a las que tanto tiempo dedicamos en un pasado presente y posterior futuro.
La semejanza que mantenemos con los murciélagos y aquel mito de que son ciegos, muestra que nosotros al igual que estos seres no podemos conocer todo por nosotros mismos. Para lograr conocer lo que trasciende mas allá de los sentido internos y externos. Necesitamos de otros para conocer.
Es el caso de la teología, que necesita del auxilio de la luz para ver la verdad. Según esta, nosotros hallamos la verdad una vez muertos, pues vemos a Dios que es suma Verdad y sumo Bien.
Y muchos se preguntarán para que les servirá entonces la verdad.
La respuesta es que según la Teología habrá unos que la hallen y otros que no. Los que la hallen serán los virtuosos y amantes de Dios, los opuestos serán los que no. Utilizar por tanto la Palabra de Dios como guia en el mundo sensible es lo adecuado en caso de no poder hacerlo a través de los sentidos. Aunque claro... Para algunos, este no es el mas adecuado. Y resulta incierto y no seguro.
Por tanto y aquí concluyo. Existe mucho conocimiento. Mas del que podamos almacenar. Y he ahí donde entra en juego la finitud humana, pues no disponemos de aquella razón infinita que se le presupone al
¡¡Feliz Semana!!